Dieta y alimentación aconsejada para el síndrome de colon irritable

Dieta y alimentación colon irritable
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El síndrome del colon irritable es una condición gastrointestinal común que puede causar malestar y afectar la calidad de vida. Una estrategia efectiva para manejar los síntomas del colon irritable es adoptar una dieta adecuada y realizar cambios en la alimentación. En este artículo, exploraremos cómo la dieta puede desempeñar un papel fundamental en el manejo del colon irritable, incluyendo qué alimentos pueden desencadenar los síntomas y cuáles pueden proporcionar alivio. También ofreceremos consejos prácticos y pautas nutricionales para ayudarte a establecer una dieta que promueva la salud intestinal y reduzca las molestias asociadas al colon irritable. Descubre cómo tomar el control de tu bienestar digestivo a través de una alimentación consciente y personalizada

El colon irritable o síndrome de intestino irritable (SII) es uno de los trastornos gastrointestinales funcionales más comunes que se encuentran en la práctica clínica. Está caracterizado por una alteración de los hábitos intestinales asociado con malestar y/o dolor abdominal, en ausencia de anomalías estructurales y bioquímicas detectables.

En el SII hay tres subtipos, con más presencia de estreñimiento, más presencia de diarrea o con combinación y alternancia de diarrea y estreñimiento.

Clasificación del SII

 

Subtipo

Características

SII-E

> 25% estreñimiento; < 25% diarrea

SII-D

> 25% diarrea; < 25% estreñimiento

SII-M

> 25% estreñimiento y 25% diarrea

SII-U

< 25% estreñimiento y < 25% diarrea

Diagnóstico del colon irritable

En ausencia de un biomarcador preciso, el SII se diagnostica principalmente en función de la sintomatología utilizando los criterios de Roma.

El diagnóstico de SII con los criterios de Roma IV requiere que el paciente tenga síntomas de dolor abdominal recurrente al menos 1 vez a la semana en los últimos 3 meses, con la aparición de síntomas al menos 6 meses antes del diagnóstico.

Los criterios también requieren que el paciente tenga dolor abdominal asociado con al menos 2 de los siguientes síntomas:

  • Dolor relacionado con las evacuaciones. Por ejemplo; si el dolor empeora o mejora después de una evacuación.
  • Cambios en la frecuencia de las evacuaciones.
  • Cambios en la apariencia de las heces.

Se debe tener en cuenta que otros trastornos como la enfermedad inflamatoria intestinal, la colitis microscópica, diarrea infecciosa, el cáncer gastrointestinal y la enfermedad celíaca pueden presentar síntomas similares al SII. Por lo tanto, hay que prestar especial atención en hacer un correcto diagnóstico diferencial y excluir estas enfermedades.

Problemas ocasionados por el colon irritable

La fisiopatología de este trastorno ha sido asociada con motilidad gastrointestinal alterada, hipersensibilidad visceral, disfunción del eje cerebro-intestino, sensibilidad a algunos alimentos, SIBO (sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado), malabsorción de hidratos de carbono e inflamación intestinal. Estos mecanismos se correlacionas con los síntomas percibidos;

  • Dolor o molestias abdominales

  • Inflamación/hinchazón

  • Flatulencias

  • Distensión abdominal

  • Esfuerzo excesivo durante la defecación

  • Diarrea

  • Urgencia en la defecación

  • Fatiga y anormalidades psicosociales (depresión, ansiedad) las cuales pueden influenciar como el paciente percibe o reacciona a la enfermedad.

Dieta para el colon irritable

Debido a la heterogeneidad de este trastorno, encontrar el tratamiento correcto suele ser un desafío. En general, los cambios en el estilo de vida y la dieta, incluyendo una dieta baja en FODMAP libre de gluten, son el tratamiento de primera línea para todos los pacientes.

Tratamiento inicial

Se deberá enfocar en eliminar alimentos que producen gases, evitar la lactosa y seguir una dieta baja en FODMAP.

Una vez que la sintomatología está controlada, se podrá comenzar a agregar algunos alimentos (1 a 2 alimentos nuevos por semana).

Eliminación de alimentos que producen gas, distensión abdominal y molestias abdominales.

Eliminar de la dieta los frijoles, repollo, brócoli, coles de Bruselas, germen de trigo, fructosa y el gluten.

Eliminación de lactosa.

Se deberá hacer una prueba de aliento de lactosa para identificar si el paciente es intolerante a la misma. Si la prueba es positiva, podría beneficiarse de la eliminación.

FODMAP

Los FODMAP (Oligosacáridos, disacáridos, monosacáridos y polioles fermentables) son alimentos que aumentan la producción de gas en el intestino, pudiendo resultar en molestias.

Aquellos pacientes siguiendo una dieta baja en FODMAP muestran una mejoría en los síntomas relacionados con el dolor abdominal, inflamación, flatulencias e insatisfacción general.

 

ALIMENTOS BAJOS EN FODMAP

ALIMENTOS ALTOS EN FODMAP

FRUTAS

Bananas, naranjas, mandarinas, kiwi, piña, limón, uvas frutos rojos, fresas, arándanos

Manzana, mango, pera, fruta seca, sandía, ciruelas, melocotón, sandía, cerezas

VERDURAS

Espinacas, zanahorias, pepino, calabacín, berenjena, tomate, lechuga, patata, boniato

Alcachofas, espárragos, repollo, cebolla, chalotes, puerro, ajo, coliflor, champiñones, calabaza, remolacha

PRODUCTOS LÁCTEOS

Bebida de almendras, avena, arroz

Leche sin lactosa

Quesos duros (Cheddar, Brie, Camembert etc).

Leche de vaca, soja, y cabra

Yogurt

Quesos blandos; cottage, ricota, mascarpone

Helado

GRANOS Y CEREALES

Avena, quinoa, maíz, pan sin gluten, arroz

Trigo, centeno, cebada, espelta

LEGUMBRES

Tofu

Cacahuetes

Garbanzos, hummus, frijoles, edamame, lentejas

FRUTOS SECOS Y SEMILLAS

Almendras, semillas de sésamo, semillas de calabaza, semillas de girasol, nueces (1-2 cucharadas)

Pistachos

ENDULZANTES

Azúcar, glucosa, aspartamo

Miel, sirope de agave, jarabe de maíz alto en fructosa, sorbitol, manitol xilitol, maltitol.

PROTEÍNAS

Pescado, pollo, pavo, huevos y carne

 

ACEITES Y GRASAS

Aceite de oliva, olivas, aguacate (en pequeñas cantidades)

 

También puede ser beneficioso realizar comidas pequeñas y frecuentes, evitar alimentos grasos, muchos hidratos de carbono, cafeína y alcohol.

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Hidratación

En episodios de estreñimiento es importante una buena hidratación para facilitar el tránsito intestinal y evitar que las heces se endurezcan. Si hay episodios de diarrea, la hidratación es igual de importante por las importantes pérdidas de agua que se producen.

Lo ideal es mantener una ingesta de agua de 2L al día.

¿Se debe eliminar la lactosa en una dieta para el síndrome de intestino irritable?

Algunos pacientes con SII refieren sentir molestias, tales como distensión o diarrea, al consumir lactosa, incluso cuando las pruebas de intolerancia a lactosa son negativas, y por lo tanto la disminución de la ingesta de lactosa podría beneficiar a algunos pacientes con SII. Esto podría deberse a que tras la ingestión de lactosa se produce gas hidrógeno y se promueve la distensión abdominal debido a la fermentación por parte de las bacterias de la lactosa no absorbida.

¿Debemos evitar el gluten en la dieta?

Evitar el gluten en la dieta de una persona con SII aún está en discusión. En primer lugar es fundamental determinar si existe o no enfermedad celíaca o alergia al trigo mediante un cribado, especialmente en aquellos pacientes que no padecen de estreñimiento. En caso de que la prueba sea positiva, efectivamente se deberá eliminar el gluten de la dieta. En caso contrario, si la prueba es negativa se deberá hacer una valoración de los síntomas ya que algunas personas que no son celíacas ni alérgicas al trigo, presentan una sensibilidad al gluten que provoca síntomas similares a los del SII, y al eliminar el gluten de la dieta dichos síntomas desaparecen.

Por otro lado, tal y como se mencionó anteriormente, algunos alimentos con gluten (trigo, cebada, centeno) son altos en FODMAP, por lo que se recomienda excluirlos de la dieta.

Otros factores relacionados con el SII

Tabaquismo y alcohol

Dado que el alcohol y el tabaco dañan la mucosa intestinal, generando mayor permeabilidad y por ende mayor respuesta inmunitaria, el consumo de estos podría favorecer la exacerbación de síntomas gastrointestinales en personas con síndrome de intestino irritable.

Actividad física

La actividad física tiene efectos positivos sobre la distensión abdominal y el tránsito intestinal en sujetos que presentan períodos de estreñimiento crónico, lo cual tiene relación principalmente con su rol antiinflamatorio a nivel sistémico.

Cada persona debería tener un plan personalizado de ejercicio físico, teniendo en cuenta el volumen e intensidad de éste. En aquellos pacientes con estreñimiento se recomienda la actividad física de moderada intensidad de 20-60 minutos al menos 3 veces por semana como el yoga o correr. Por lo contrario, ejercicios de larga duración y alta intensidad, asociados a estados de deshidratación, postprandiales y con altas temperaturas ambientales, podrían contribuir a la aparición y/o empeoramiento de los síntomas en las enfermedades del tracto gastrointestinal en presencia de diarrea.

Conclusiones

Tras el diagnóstico de síndrome de intestino irritable, el establecimiento de una dieta baja en FODMAP bajo la supervisión de un Nutricionista junto con un plan específico de actividad física moderada de acuerdo a los síntomas, puede contribuir al alivio y mejora de los síntomas.

Bibliografía

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