Tabla de Contenidos
Toggle¿Qué es la empatía?
Si preguntamos sobre la empatía nos encontramos la famosa definición de ponerse en el lugar del otro, una definición confusa y algo ambigua. Es la habilidad cognitiva, afectiva y emocional de una persona que es capaz reconocer los sentimientos, emociones y pensamientos relacionados de otra persona. Empatizar requiere conocer y comprender el mundo interior de la otra persona y acompañarle en sus sentimientos.
¿Qué significa tener empatía y perspectiva social?
La empatía puede confundirse con conceptos similares como la simpatía o la perspectiva social. Como decimos, la empatía supone comprender y acompañar los sentimientos, emociones y pensamientos de la otra persona sin juzgarlos, lo que requiere saber escuchar de forma activa, sin tener que absorber o cuidar el contagio de las emociones del otro. La simpatía significa compartir emociones con la otra persona a través de un diálogo adecuado. Ambas nos permiten crear un vínculo con la otra persona, aunque con la empatía ese vínculo se hace más estrecho, ya que ponemos el foco únicamente en la persona a la que escuchamos.
Por otro lado, no debemos confundirla tampoco con la perspectiva social, que es la manera en la que creamos inferencias e impresiones de otra persona a través de la observación, atribución, integración o afirmación. Está muy implicada la influencia social a la hora de actuar esta percepción.
Tipos de empatía:
Empatía cognitiva
Es la identificación del estado mental en el que se encuentra la persona con la que interactuamos a través de la comunicación verbal y no verbal, tratando de entender lo que la persona piensa o siente, pero sin implicarnos de forma personal.
Empatía emocional
Esta empatía sí requiere una implicación personal con aquello que la otra persona comparte, tratando de entender lo que siente. Requiere de una empatía cognitiva y compasiva.
¿Cómo es una persona que le falta empatía?
Dentro del abanico de la afección en salud mental, las emociones son las más “castigadas”. Sabemos que uno de los puntos fuertes es la dificultad para regular emociones y en ocasiones identificarlas, expresarlas o comprenderlas lo cual hace que les cueste más empatizar con otros. Esto no significa que no puedan hacerlo, requieren de otras herramientas.
Entre los trastornos donde podemos encontrar estas dificultades encontramos el trastorno de espectro autista que se caracteriza por déficits en la comunicación e interacción social, incluyendo la reciprocidad socioemocional, la comunicación no verbal y habilidades para desarrollar, mantener y entender las relaciones. Este aspecto varía según el grado de afección.
En los trastornos de espectro esquizofrénico, psicóticos o trastornos de la personalidad, la inestabilidad emocional que las caracteriza altera las emociones, sentimientos, sensaciones y pensamientos, así como la conducta de gestión y control de las mismas. Esto hace que la capacidad de empatizar se dé con dificultad o que haya un déficit de la misma.
Por último, los trastornos del estado de ánimo, también afectan a la capacidad de empatizar. Las personas que padecen trastornos depresivos o ansiosos, incluyendo síntomas asociados como anhedonia, alexitimia o sensación de apatía, presentan dificultades a la hora de experimentar o expresar emociones y sentimientos. La falta de empatía es común es los estados depresivos o ansiosos, pero se van recuperando cuando hay una mejora de los mismos.
Características de una persona con empatía
- Saber escuchar de forma activa
- Interpretar señales no verbales expresión facial, tonalidad, fluidez o gestos que acompañan a la comunicación verbal.
- Mostrar comprensión y evitar juicios o interpretaciones
- Prestar ayuda emocional si es necesario
¿Cómo se trabaja la empatía?
Debemos aprender vocabulario emocional (definiciones y funciones) y vivir experiencias, y el acompañamiento profesional. El conjunto de experiencias nos permite poder entender cómo se siente la otra persona en un suceso y acompañarla con compasión. Este trabajo empieza desde la infancia.
¿Qué relación tiene la empatía con la salud?
Poder empatizar con las otras personas nos permite establecer vínculos estrechos con otros. Además, nos da criterio a la hora de tomar decisiones y protege de adquirir un carácter cínico o ególatra. Es una habilidad fundamental para sentirnos incluidos e integrados socialmente.